La FAO define el desperdicio alimentario como “El descarte de alimentos aptos para el consumo”. La Unión Europea lo define como «Alimentos descartados por razones económicas, estéticas o por proximidad de fecha de caducidad, pero perfectamente comestibles y aptas para el consumo humano”. Según los datos de la propia Comisión Europea y dentro los porcentajes de producción de desperdicio, la hostelería representa un 12% de los mismos.
Hay diferentes medidas que se pueden aplicar para la reducción del desperdicio y se pueden organizar en una serie de acciones:
- Prevención mediante la gestión y la planificación
- Redireccionar los excedentes a la donación
- Utilizar los residuos en usos industriales
- Destinar los residuos orgánicos a compostaje y a la producción de energía renovable
- Residuo y basura
La gestión activa en favor de la reducción del desperdicio alimentario tiene elementos positivos para nuestros negocios hosteleros:
- Mejora la gestión de stocks
- Permite monetizar en la reutilización de los desperdicios en segundo uso (ec.circular)
- Mejora la reputación corporativa
- Nos compromete con la sostenibilidad
- Punto de partida: La preparación de los menús
No hay mejor forma de combatir el desperdicio alimentario que con una correcta planificación y definición de los menús. En este sentido, la organización europea de la hostelería propone a los establecimientos de hostelería comprobar con regularidad que los menús, en cuanto a tamaño y productos utilizados se refiere, se ajustan a las necesidades de los clientes.
- Selección y compra de productos
El siguiente paso para reducir el desperdicio alimentario en los establecimientos pasa por optimizar el proceso de compra a distribuidores y proveedores de hostelería.
- Almacenamiento de productos
Uno de los aspectos clave para reducir el desperdicio alimentario es garantizar la conservación y almacenamiento de los alimentos.
- La cocina y la elaboración de platos
Definir con exactitud las cantidades de ingredientes y ajustar las proporciones a la necesidad.
- Aborda el problema con tus clientes
El problema del desperdicio alimentario es un asunto que concierne tanto a los hosteleros como a los clientes.
- Después del servicio
Utilizar productos no vendidos o con próxima caducidad para comida de personal y emplear excedentes para otras elaboraciones.
- Reutilización y reciclaje de alimentos
Acciones que tengan un marcado carácter solidario y de protección del medio ambiente como donaciones solidarias.
Si a pesar de todas estas estrategias y consejos para combatir el desperdicio alimentario en hostelería no se consigue reducir el volumen de alimentos desaprovechados, desde APS podemos ayudarte en la gestión y operativa de tu establecimiento hostelero, logrando con ello una mejora operativa en muy corto espacio.
Fuente: Hostelería de España.